Historia de La Caleta de Famara: de almacenar pescado a pueblo surfista
La Historia de La Caleta de Famara son dos siglos que transitan entre almacenar pescado a erigirse en hedonista pueblo surfista.
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Pura conexión con la naturaleza de Lanzarote. Playa Famara transpira ese aire natural por todos sus poros. ¡Vívela!
Solo bajo la inmensidad del Risco de Famara, enfrentado a la postal colosal de La Graciosa y al inmenso brazo de mar de aguas turquesas.
Una mujer enlutada se acercó a Juana Rafaela y le pidió que cumpliesen la promesa de construir la ermita o el volcán correría de nuevo.
Amaneceres de Costa Teguise desde sus mejores enclaves: las orillas de El Ancla, Playa Bastián y al norte de Los Charcos.
Piscinas naturales, calas nudistas, playitas…pero playa, lo que se dice playa en el noreste de Lanzarote, esa es La Garita de Arrieta.
Las hogueras por San Juan conforman una de las señas de identidad de Lanzarote cuyo origen pagano se remonta a los aborígenes canarios.
Un paseo por Montaña La Vieja de Uga a través de su veredita supone situarte entre dos tierras: Timanfaya y Los Ajaches.
La mejor playa de Costa Teguise es El Ancla por la calidad extraordinaria de sus aguas y por su ubicación que la resguarda del viento.
Sin duda una de las playas más exóticas de Canarias que presenta unas vistas absolutamente mágicas a Montaña Clara y Alegranza.
La Historia de Arrecife de Lanzarote está salpicada de cientos de episodios desde su primer asentamiento a mediados del pasado Siglo XV. Sin embargo, con independencia de las vicisitudes, penurias y vaivenes, siempre, hasta hoy, permanece una constante en el modus vivendi de quienes la vivieron y la viven: el
Impresionante cala del borde costero del Monumento Natural de La Corona, La playita es una joya por su jable finísimo y su entorno de malpaís y líquen.
En Lanzarote los relieves volcánicos y el crisol de colores inabarcable transforman el amanecer en un momento portentoso.
Momento soberbio made in César Manrique: Tropezar de sopetón con la postal del Río y las islas del Archipiélago Chinijo.
Los 10 mejores senderos para conocer Lanzarote caminando: Montañas de Fuego, Jable, Malpaís de líquen, valle de cenizas volcánicas, tuneras.
Contemplar pausadamente El Río y las islas del Archipiélago Chinijo desde el Risco de Famara…un imperdible en su visita a Lanzarote.
¿Qué ver en Teguise? La Real Villa de Teguise es el pueblo más bonito de Lanzarote y uno de los 100 más bonitos de España.
A un paso de África y en plena ruta a las Américas, Lanzarote era atacada por los piratas y tuvo que levantar para su defensa estos Castillos.
Viaje al corazón del volcán, a jameos y esculturas suspendidas en el cielo, arquitecturas inéditas y encuentros con el Río: ¡Ave, César!
La primera genialidad de Arte y Naturaleza de César Manrique en Lanzarote, que se funden en esta obra que nos acerca a las entrañas del Túnel de la Atlántida.
Sal y aroma a salitre. Uno de los emblemas paisajísticos de Lanzarote ligados a la historia y la economía insular, unida al mar y al pescado…Visita obligatoria.
El corredor de jable de Lanzarote, un aluvión de conchitas marinas, preferimos admirarlo desde lo alto de Pico Colorado, en Soo.
La Historia del Carnaval de Lanzarote es transgresión, imaginación, socarronería…Los Buches de Arrecife y Los Diabletes de Teguise.
El Mercado de Uga mantiene su esencia de ofrecer producto de kilómetro 0 lanzaroteño luciendo palmito nuevo en su inmueble.
Pequeña cala localizada junto al salinar de Guatiza acotada por unos diques que frenan la bravura del mar en esta zona de Lanzarote.
El sendero a Montaña Bermeja desde el Morro de las Betancoras nos situará ante un escenario singular con una banda sonora única.
El ascenso al Valle de Fenauso te lleva a divisar dos islas en una: Los Ajaches y el Parque Nacional de Timanfaya.
Del Mar al Río es el sendero de mediado recorrido que atraviesa de costa a costa el litoral del municipio de Teguise.
Los finaos de Lanzarote son un conjunto de ritos y expresiones culturales en respeto y recuerdo por los que murieron.
La Casa de Juanita esconde la triste historia de Juanita que necesitaba del yodo marino para intentar superar la tuberculosis.